Me he pasado el fin de semana leyendo un fascinante estudio sobre el último gran fenómeno editorial en USA. Se trata de “The Secret”.
Recuerdo que vi este libro en la sección de libros de autoayuda de la duty del JFK. Me llamó la atención su presentación misteriosa y cuidada. Y también el DVD que incorporaba.
Pero lo hojeé un poco y no me pareció nada excepcional. Una especie de vulgar fusión entre Creative Visualization, el legendario best seller de Shakti Gawain y el Código da Vinci. Un poco de metafísica por aquí, algo de psicología cognitiva por allá, cositas de Chopra o de Napoleon Hill, en fin, la típica basurilla del self help.
Pues me equivoqué. Debí haberlo comprado. Porque tenía en mis manos lo que habría de convertirse en uno de los fenómenos editoriales más grandes de todos los tiempos. Hace muy poco se acaba de imprimir la segunda edición, con la friolera de 2 millones de ejemplares, que se dice pronto.
¿Cuál es el secreto de “The Secret”? Es complicado. Es una perfecta mezcla de marketing genial, técnicas publicitarias virales, manejo increible de los medios de comunicación…y la infinita credulidad del ciudadano norteamericano medio.
Me ocuparé más adelante en profundidad sobre esto. Por ahora, recomiendo echar un vistazo al DVD (al menos una parte de él). Merece la pena. Son unos maestros.
Hoy domingo, 22 de Julio, los periódicos publican el caso de otra víctima de la violencia de género. Desolador. Uno tiende a pensar que esto empeora. Pero no es así. Al menos a nivel de conciencia social las cosas están cambiando y a mejor. Consolémonos con eso.
Y si alguien lo duda, que eche un vistazo a este vídeo de Martes y 13, que apareció en un programa de TVE en la nochevieja de 1991.
Han pasado tan sólo 16 años. Pero ahora, este vídeo nos parece de un anacronismo asombroso. Sería algo impensable en nuestros días. Si a alguien le diese por emitirlo, lo normal es que le cayese encima la sociedad entera.
Por lo tanto, en cierta dirección si vamos a mejor.
Copio más abajo algunos de los textos de la nueva asignatura escolar “Educación para la Ciudadanía”.
Según los señores Obispos de la Conferencia, esta asignatura representa, con mayúsculas, El Mal. Ni más ni menos. He aquí pues una sugestiva idea para la próxima película de terror. Nada de hablar de exorcismos, ni de matanzas en Texas, ni de pesadillas en Elm Street, ni de almas esclavizadas por el Maligno. Ni mucho menos. Para asustar de verdad y hacer temblar a los espectadores, hagamos una superproducción llamada “Educados para Ser Ciudadanos”…Oh, creo que producirá estragos en los sistemas emocionales de millones de personas…Miedo irresistible…pánico insuperable…En fin, leamos por favor algunos párrafos del temario y juzguemos nosotros mismos si el tema tiene todas esas posibilidades horripilantes.
En cambio, lo que me extraña es que los señores Obispos, sus ilustrísimas, no hagan tanto ruido para hablar del drama de las pateras, que hoy se ha cobrado otras 50 víctimas en el mar. A mí esos infelices ahogándose colectivamente en medio de la noche, sí que me parece una cierta representación del Mal, con mayúsculas. Pienso en esas mujeres embarazadas, en esos hombres engañados, en esos niños, en esos gritos de horror entre las olas, y siento un profundo malestar interior. Eso sí que me parece terrorífico. Pero es indudable que para los Obispos, el verdadero problema no son estos centenares de cadáveres flotando en el Estrecho. Y no consideran que este tema sea tan importante como lo de la dichosa asignatura. Al menos eso es lo que se deduce cuando uno lee los periódicos, porque seguro que si se lo consultamos a sus ilustrísimas nos sueltan un sermón aclaratorio… En fin, debe ser que yo tengo algún problema de percepción. Así que voy a releer de nuevo los textos que aquí copio, por ver si se me escapa algo. Seguro que entre líneas, hay ahí algún mensaje de Belcebú. Porque si no, no me lo explico, la verdad.
“- Los derechos humanos. 1. Inalienables: "Los derechos humanos no se compran, ni se ganan, ni se heredan. Son inalienables, es decir, nadie puede legítimamente privar de ellos a otra persona por ninguna razón”.
2. Declaración Universal: “Existen documentos que definen las normas correspondientes a los derechos humanos. El más aceptado es la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que fue aprobada el 10 de diciembre de 1948 por la ONU”.
- Contaminación. 1. Contaminación: “La explosión de una planta química en Bhopal, India, en 1984, causó miles de muertos, un gran número de enfermos y una polución que sigue contaminando. (…) Union Carbide India operaba la planta química de Bhopal bajo el control de Union Carbide Chemical Corporation, empresa con sede en Estados Unidos. La legislación internacional en materia de derechos humanos impone a los Estados, incluida India, la obligación de proteger a la población del impacto de las prácticas negligentes […]”.
- Tortura. 1. “Anula los derechos humanos; todos los derechos”.
2. El caso Abu Ghraib: “La crueldad de las fotografías de la tortura en la prisión de Abu Ghraib se revela con sólo mirarlas una vez. Hay una fotografía que muestra prisioneros desnudos con sus cuerpos amontonados. (…). Lo que resulta más inquietante es la cara de los soldados. Sonríen. No es una sonrisa sádica ni forzada. Es una sonrisa relajada, de buen humor (…), fijada más allá de los cuerpos que han sido humillados, convertidos en objetos”.
- Los derechos de las mujeres. 1. ¿Por qué hablar de ellos?: “Las mujeres representan aproximadamente la mitad de la población mundial. Los derechos que deberían de ver satisfechos son los mismos que recoge la Declaración Universal de los Derechos Humanos. (…) La realidad demuestra que el colectivo femenino sufre en el mundo, todavía hoy y de forma bien marcada, diferentes formas de discriminación”.
2. Educación: “Dos terceras partes de las personas analfabetas del mundo son mujeres”.
3. Ablación: “En muchos países africanos y asiáticos la mutilación genital femenina (ablación del clítoris o infibulación) se considera una práctica legal y culturalmente entendida y bien vista”.
4. Violencia: “En España, en 2006, 68 mujeres han muerto a manos de su pareja o ex pareja. Esto es, una mujer cada cinco días. De ellas, 20 habían denunciado al agresor”.
1. El efecto invernadero. “Está calentando el planeta más intensamente y deprisa de lo que ya sucedía en el actual periodo posglaciar. Esto convierte el tiempo climático en errático y desmesurado (…), poco predecible, muy desastroso y pronto irreversible”.
2. Nivel del mar: “Glaciares y casquetes polares están deshelándose y vierten enormes cantidades de agua a los océanos”.
3. Algunos datos elocuentes: “En los últimos 100 años, el mar ha subido de 1,0 a 2,0 milímetros al año. En los deltas más llanos y poblados de la tierra y en islas de baja altura, 1,0 milímetros de elevación hace retroceder la costa 1,5 metros”.
- Inmigración. 1. Movimiento de personas: “(…) con desplazamientos cada vez más masivos, éstos se basan en relaciones de desigualdad económica. Primero, los españoles hemos emigrado a Europa, y ahora que somos Europa otros vienen aquí. El pobre va donde está la riqueza”.
2. Opciones. Modelo multicultural, asimilacionista e intercultural. El multicultural: “La cultura es como un gueto que hay que preservar. Múltiples grupos culturales cerrados reafirman su identidad rechazando el contacto con los demás”. Asimilacionista: “La cultura mayoritaria se impone (…)”. Intercultural: “Respeta las diferencias, fomenta el intercambio cultural individual, libre y enriquecedor. La identidad colectiva resultante, mestiza, sería nueva y suma de las individuales”.
¿Qué? Espeluznante, ¿eh que sí? Yo he pasado un miedoooo…
Uff. ¡Pero cómo me pongo de mal humor con todo esto!
POETAS ASESINOS. REFLEXIONES SOBRE CREACION PUBLICITARIA, AL HILO DE UN GRAN SPOT.
El spot “Vaso” para promover la donación de órganos, es un gran spot publicitario. Sirve para poner de manifiesto algunas de las claves de la publicidad como arte.
Comencemos por suponer que nos toca a nosotros hacer este spot, por encargo de alguna sociedad dedicada a impulsar la donación de órganos.
Nuestra misión es convencer de que es preciso donar órganos. De que es bueno donar órganos.
¿Cómo hacer el spot?
Ante este desafío, muy probablemente nuestro primer impulso es meramente limitarnos a explicar ante la cámara, eso sí, con gran énfasis, las muchas vidas que dependen de una decisión de donar. Pero algo nos dice que eso no va a funcionar. Demasiado primario, demasiado elemental, demasiado aburrido.
Otro enfoque nos llevaría a dramatizar el problema. Tal vez concebimos a unos padres esperando ansiosos el órgano para su hijo enfermo. Bien, hemos avanzado algo por este camino. Pero algo nos dice que seguimos en una clave poco eficaz. Nuestro discurso sigue siendo primario, manido, carente de un elemento sorpresa. Carente de creatividad en suma.
En publicidad superior, lo que necesitamos es decir lo que tenemos que decir (esto es, que es preciso tomar ahora mismo la decisión de donar). Pero decirlo de una manera especial. De una manera que, por simplificar, llamamos, manera “creativa”.
Y ¿qué es una manera creativa de comunicar?
Para empezar, comunicar creativamente es comunicar con singularidad. Una persona normal está expuesta a miles de impactos publicitarios a lo largo del día. Si nuestro anuncio no tiene algo de especial, algo diferente, lo más probable es que pase por la mente de los espectadores tal como lo hace el agua por el culo de un cisne que se desliza en la noche por el plácido estanque…
En segundo lugar, comunicar creativamente es comunicar de forma relevante. Hacer un anuncio diferente, impactante, sería demasiado fácil si no nos obligásemos a ser-además-relevantes. Nos bastaría poner un mono ante la cámara y conseguir que hiciese algún tipo de gracia más o menos espectacular. Pero no hacemos un anuncio de monos.
La relevancia es la parte más técnica de la creación publicitaria. El gran secreto para conseguirla se sintetiza en una especie de mantra que el creativo debe pronunciar una y otra vez: encontrar el drama inherente de las cosas. Sí. Encontrar el “drama inherente de las cosas”. Esta es la clave. Porque por debajo de todo producto, de todo servicio, de toda propuesta, hay un drama humano. Está oculto. Pero existe. Y la misión del publicitario es encontrarlo. Y explotarlo creativamente. Para ello, es preciso reflexionar intensamente sobre el producto o servicio. Analizar por qué se usa, cómo se usa, qué es lo que lo hace necesario. Y con suerte, de repente, aparece el “drama inherente”.
Finalmente, comunicar creativamente es comunicar de forma simple. La economía de recursos, la unidireccionalidad de la comunicación es importante porque sin ella, los anuncios no son memorables, y su efecto persuasivo es efímero.
La singularidad, la sorpresa, la simplicidad
El spot del vaso comunica con singularidad, sorpresa y simplicidad. Es extremadamente singular mostrar en un spot la forma en la que un espíritu intenta comunicarse con nuestro mundo a través de un vaso.
Y la estructura narrativa del spot del vaso también tiene un fuerte componente de sopresa. El spot nos intriga hasta los últimos segundos en los que súbitamente lo comprendemos todo.
Junto con ello, observamos una ejecución simple, casi minimalista. No sobra nada. Cada elemento de la historia trabaja en una misma dirección. El impacto se redobla por la sencillez. En este sentido, el creativo se ha expresado con la eficacia de un consumado poeta. Ha conseguido una manera diferente, concisa y hasta lírica de expresar una idea.
Pero, sobre todo spot del vaso comunica con relevancia. El creador de ese spot ha capturado hábilmente, con gran profesionalidad, el verdadero drama inherente al problema de la donación de órganos, esto es, que la gente se olvida de hacerlo justo cuando puede hacerlo, es decir, cuando aún está viva. Y luego es fatalmente tarde. El creativo ha encontrado la forma de dar un aldabonazo en la conciencia de cada uno de nosotros. Ha encontrado un fascinante drama humano debajo del frío “briefing” que ha recibido de su cliente. Y lo ha explotado con la precisión de un asesino.
Un poeta. Un asesino. Eso es, metafóricamente hablando, lo que debe ser un gran publicitario.
Asesino para buscar, con precisión, el “cuero cabelludo” de la voluntad del cliente. Para descubrir la idea justa que de verdad le moviliza y motiva.
Y debe ser también poeta para expresar esa idea de una forma singular, simple, evocadora. Pura.
Cisnes trompeteros
Poetas y asesinos. Cisnes y heraldos. Eso son los grandes creativos de publicidad. Como, en cierta medida, también lo son los grandes guionistas de cine o televisión.
Si uno se siente, sí, capaz de ser poeta y, figuradamente hablando, asesino; si uno se siente capaz de ser un cisne, pero también un heraldo…entonces está llamado a ser creativo de publicidad. Y a disfrutar del raro privilegio de llevar sus ideas hasta el cerebro y hasta el corazón de millones de personas.
UN FRACASADO ILUSTRE.
A veces tendemos a cometer la simplificación de clasificar a las personas como fracasados y triunfadores. Según este criterio, unos parecen estar condenados siempre al error, mientras que los otros son los que encuentran en toda situación el camino del éxito. De algún modo, todo parece estar decidido, a priori, para ambos tipos de personas. Sin embargo, la experiencia demuestra que en la biografía de todo “triunfador” suele haber una larga historia de fracasos.
Alguien dijo-y con mucha razón-que un triunfador no es sino un hombre cuyo coraje le permite ir de fracaso en fracaso hasta el éxito. Tal vez sea cierto. Quizá la clave está en ver cada uno de los fracasos como simples etapas hacia el éxito final…
FRACASADO ES EL QUE CREE SERLO
La Historia está llena de “fracasados” que alcanzan finalmente el éxito por la articulación de la perseverancia con el talento, y el tenaz desafío a lo que a primera vista se diría que es una conjura de las fuerzas del destino y el azar contra los propósitos propios. Hay muchos ejemplos, uno de ellos, especialmente notorio, es, por ejemplo, Cristobal Colón, de quien hablaré en otro post. Pero hay muchos más. A continuación me voy a referir a uno de ellos, porque me parece que sus peripecias no sólo llevan a la reflexión sino también a la risa. Y es combinación es irresistible.
Tal vez las líneas que siguen sirvan para meditar sobre lo valiosos que son los fracasos y los errores de nuestra vida. Agradezco la fuente de la información a mi padre, que me regaló hace unos meses un librito delicioso sobre el “fracasado” en cuestión . A lo mejor concluimos que sólo es fracasado el que cree serlo. Y esto me recuerda también las inmortales palabras del proteico Kowalsky en el Tranvía Llamado Deseo, mientras jugaba chulescamente al poker: “suerte es creer que se tiene”, decía el personaje interpretado por Brando… Cuánta razón. Pero vayamos a nuestra historia.
EL BASTARDO GORDITO DEL NOTARIO
Nuestro fracasado es hijo ilegítimo de un notario y de una chica del pueblo. Su madre, tras dar a luz, se casa con un pastelero en paro de la localidad.
Su padrastro pastelero le envicia con los pasteles y le convierte en un verdadero glotón.
Su padre natural le coloca a trabajar en un taller, pero el dueño del taller le castiga por tragón. Los demás aprendices del taller le llaman “el gordito” y se burlan de él.
Como gana muy poco dinero en el taller, se dedica a trabajar por las noches en una taberna “Los Tres Caracoles”. Su puesto es pinche de cocina.
En la taberna, se empeña en cambiar la comida habitual (trozos de carne guisada con harina de maíz) por canapés al estilo nouvelle cuisine. Sus canapés “creativos” no tienen ningún éxito y los parroquianos de la taberna quieren apalearle, hasta el punto de que tiene que volver apresuradamente al odiado taller.
Unos años más tarde, la taberna de los Tres Caracoles desaparece a consecuencia de un incendio y nuestro fracasado convence a un amigo para establecer un establecimiento similar al que llaman Las Tres Ranas.
En la nueva taberna, nuestro fracasado intenta de nuevo la línea nouvelle cuisine, y prepara canapés de zanahoria y anchoa. Por supuesto, la taberna de las Tres Ranas es un fracaso total.
En los tres años siguientes, ya frisando los 30, nuestro fracasado se convierte en un parado de larga duración. Vaga por la calles como músico callejero y no consigue ningún trabajo como camarero o cocinero en ningún establecimiento.
Al cumplir 30 años, parece que le cambia la suerte. Escribe una carta de su puño y letra al hombre más rico y poderoso de la ciudad. En la carta, nuestro fracasado indica que “no tiene rival en la fabricación de todo tipo de maquinaria, que dibuja maravillosamente, y que nadie le supera en la preparación de pasteles.”
El poderoso millonario le contrata, intrigado por la carta de autopresentación, y le asigna tareas en el campo de la seguridad, como músico para los banquetes, y también le asigna ciertas responsabilidades en relación con la organización y mantenimiento de las cocinas de la mansión.
UN EXTRAVAGANTE JEFE DE COCINAS
Nuestro fracasado aprovecha sus nuevas responsabilidades en las cocinas para ensayar de nuevo sus tapas “nouvelle cuisine” que siguen sin tener la menor acogida favorable, y también para ensayar el funcionamiento de ciertos aparatos ideados por él para facilitar el trabajo de los pinches y los cocineros. Muchos de estos ingenios son considerados completamente absurdos e innecesarios por la mayoría de los trabajadores de la mansión. Incluso peligrosos. Entre ellos destacan un aparato para capturar ranas en los depósitos de agua, un asador con hélices autopropulsadas, un nuevo calentador de agua por carbón, una extraña maquina para cortar rebanadas de pan, movida por algo similar al aire comprimido, un aparato basado en pólvora para encender los fuegos automáticamente, un sistema de limpieza e irrigación de suelos que funciona con dos bueyes uncidos a una noria, un tambor y unas flautas automatizadas para animar y dar ritmo a los trabajos de la cocina, y una picadora de carne en la que, en teoría, se puede introducir una vaca entera, que debería convertirse en picadillo al cabo de sólo unos minutos. También trata de instalar un sistema de fuelles accionados por un caballo, para depurar los malos olores de las cocinas.
Sorprendentemente, nuestro fracasado, ya treintañero, consigue imponer sus ideas, si no en lo relativo a las tapas “nouvelle cuisine”, sí en los ingenios extravagantes, auténticos inventos del “TBO”, que diseña para modernizar y automatizar las cocinas de la mansión. Pero el resultado es un auténtico desastre, como puede juzgarse por un relato detallado y objetivo que un embajador, que frecuentaba la mansión, hace de aquellas grandes cocinas en las que ha intervenido con libertad nuestro fracasado. Sus palabras no tienen desperdicio:
EL RELATO DEL EMBAJADOR
“La cocina que dirige ese hombre es un gran caos. El señor de la casa me ha dicho que el esfuerzo de los últimos meses se había hecho con la intención de economizar esfuerzos humanos; pero ahora, en lugar de los veinte cocineros antes empleados en las cocinas, las personas que se apiñan en este lugar llegan casi al centenar, y ninguno de los que yo pude ver estaba cocinando, sino que todos estaban atareados con los grandes dispositivos que ocupaban todo el suelo y los muros, ninguno de los cuales parecía comportarse de manera útil o para la tarea para la que fue creado. En un extremo del recinto una gran noria, empujada por una furiosa cascada, vomitaba y rociaba con sus aguas a todos los que pasaban por debajo, y había transformado el suelo en un lago. Fuelles gigantescos, cada uno de tres metros y medios de largo, colgaban de los techos, siseando y rugiendo con el propósito de limpiar los humos de los fuegos, pero todo lo que lograban era avivar las llamas, en perjuicio de aquellos que debían estar cerca del fuego, tan peligrosas eran las errantes llamas, que una multitud de hombres armados de cubos se afanaban en tratar de dominarlas, aun cuando otras aguas brotaban en chorros en cada rincón de los techos. Y en este catastrófico lugar se paseaban por todas partes caballos y bueyes, algunos dando vueltas y más vueltas, y otros arrastrando los ingenios para limpiar los suelos; realizando sus tareas con gran denuedo pero también seguidos de otro gran ejército de hombres para limpiar las suciedades de los caballos. En otro lugar vi la gran picadora de vacas estropeada, con media vaca todavía hincada y asomando por fuera de ella, y hombres con palancas intentando sacarlas de allí. Y aún en otro lugar el ingenio de continuo de troncos y leña arrojando suministro dentro de la habitación y que no podía ser detenido, de manera que en lugar de los dos hombres que llevaban los troncos al fuego como antes se acostumbraba, ahora había que emplear a diez para sacarlos. Los gritos que habíamos oído vimos ahora que los proferían unos pobres desdichados que estaban abrasándose o ahogándose o asfixiándose, y las explosiones de la pólvora que el hombre se empeñó en utilizar para prender los fuegos; y como si este estruendo no resultara suficiente, aún se combinaba con la música de sus tambores que redoblaban , aunque los que tocaban los órganos de boca creo que se habían ahogado…Como antes he descrito, las cocinas de la mansión eran un gran caos…y no creo que esto complaciera al dueño de la casa”.
DESASTRE TRAS DESASTRE
Tras todo este caos que con tanto detalle nos detalla el embajador, nuestro fracasado centra sus esfuerzos en organizar fiestas originales y llamativas y consigue permiso para organizar a su manera la boda del dueño de la casa. Para ello, concibe una replica de 60 metros de longitud de la mansión, construida toda ella con masa de pasteles y pasta de maíz y mazapán multicolor. Los invitados a la boda pasarían por las puertas de pastel, se sentarían en taburetes de pastel, frente a mesas en las que, por supuesto, comerían… pastel. Pero lo que no tuvo en cuenta nuestro fracasado es que este tipo de construcción en materiales comestibles, constituiría una atracción irresistible para todas las ratas de la ciudad. De modo que en la víspera de la boda, todo el personal de seguridad de la mansión se pasó toda la noche librando una batalla campal contra los roedores. Al amanecer, la escena de de total desolación, con todo el patio cubierto por las ruinas del pastel y decenas de empleados abriéndose camino entre migas que les llegan a la cintura para limpiar el lugar de cadáveres de ratas. Como consecuencia de ello, es preciso cambiar apresuradamente el lugar de celebración de los esponsales.
La historia de fracasos de nuestro…”fracasado””, no termina ciertamente aquí. Incluso podríamos decir que en algunos sentidos, empeora. Sin embargo, es suficiente para nuestro propósito. Y ya es el momento de indicar que nuestro fracasado no es otro que…Leonardo da Vinci, tal vez uno de los hombres más brillantes de la historia de la Humanidad.
LA FACETA OCULTA DEL GENIO
Cada uno de los episodios aquí relatados es rigurosamente biográfico y exacto. De hecho, poca gente sabe todavía que la obsesión de Leonardo eran las artes culinarias. Y está ya demostrado que, muchos de sus espléndidos dibujos diseños de ingenios y máquinas, que durante más cuatrocientos años no se supieron interpretar adecuadamente, se
correspondían con los absurdos aparatos que concibió para su utilización las cocinas del palacio de los Sforza, en Milán, donde vivió muchos años bajo el mecenazgo de Ludovico el Moro (el “millonario” de nuestro relato). Y donde ocurrieron muchas peripecias como las contadas en las líneas anteriores.
Así que nuestro fracasado sólo lo era en apariencia. Pese a su origen humilde. Pese a su obesidad infantil. Pese a sus sucesivos y estrepitosos fracasos como camarero, como cocinero, como empresario…Leonardo jamás perdió el entusiasmo. Seguramente nunca dejó de creer en sí mismo. Y el resultado de su coraje…ya es simplemente parte de la historia de la Humanidad. Y, sobre todo, es una prueba elocuente, de que no hay verdaderamente fracasados ni triunfadores. Porque, tal vez, todo sea una cuestión de simpre convicción y de fe en uno mismo. Así de sencillo.
Otro vídeo más sobre comidas raras. Otra excusa para meditar sobre las diferencias culturales. ¡Bon appetit!
18 de Julio. Una vez más un triste aniversario de una locura colectiva.
Raymond Carr sintetizó en una sola palabra esa amalgama de desvarío generalizado, utopía, euforia belicista, idealismo y ciega irresponsabilidad que caracterizó aquel estado de ánimo. El estado de ánimo de todo un pueblo en el momento en el que la Guerra Civil se desencadenaba. Entusiasmo. El jodido, infeccioso entusiasmo.
Entusiasmo es una interesante palabra con un extraño origen. Etimológicamente proviene de una palabra griega, “enthousiasmós”, que significaba literalmente “llevar a los dioses dentro” y que se usaba para describir la locura que los dioses inducían en los mortales cuando deseaban que afrontasen empresas inasequibles desde el puro sentido común.
Y ciertamente fue una locura colectiva lo que se extendió por toda España en aquellos tiempos. Esos dioses poderosos que son la Utopía y la Ideología entraron fatalmente en los espíritus de millones de españoles…
Porque puro entusiasmo era ni más ni menos lo que describía el General Martínez Campos al relatar la llegada a Pamplona de los voluntarios requetés (foto reproducida). “Por la tarde del 18 de julio empezaron a llegar de las aldeas próximas y lejanas camiones alquilados por los alcaldes, atestados de navarros viejos y jóvenes que respondieron al llamamiento con un entusiasmo indescriptible. A medida que los camiones circulaban por la plaza Mayor de Pamplona recibían una ovación de la multitud que, al sonido de las cornetas, aparecía en los balcones engalanados con banderas…música y aplausos.”
La Guerra Civil no hubiese sido posible sin ese contagioso, estúpido entusiasmo colectivo. Y, de alguna manera, la historia misma de aquel conflicto, no consistió en otra cosa que en la conversión de ese entusiasmo en eficacia militar a lo largo de tres terribles años. Un proceso que fue provocando grados crecientes de desilusión masiva a medida que la euforia inicial iba disolviéndose por la lógica implacable de la destrucción, de las bombas, de la muerte.
Esta mañana no usé la cámara fotográfica. Mal hecho. Hoy era el día perfecto. Las nubes daban un interés especial a cada cosa. A primera hora di mi vuelta en bicicleta por la dehesa y todo me pareció renovado, diferente. Los mismos paisajes que veo cada día me resultaron fascinantes. Las liebres se cruzaban en mi camino, sorprendidas de ver un ciclista tan temprano. Las mariposas, ansiosas de calor, se posaban en las moreras con las alas extendidas. Todo era nuevo, todo olía a nuevo…y simplemente por el mágico efecto de las nubes suavizando la luz lateral del amanecer.
Entonces me acordé de las palabras de Wilde en aquella maravillosa conferencia para estudiantes de arte que tantas veces recuerdo cuando pienso en lo mal fotógrafo (léase mal artista) que soy. Me voy a permitir una traducción apresurada de las geniales palabras de tío Oscar “…Para el verdadero artista, nada es bello o feo en sí mismo. Con los hechos del objeto él no tiene nada que hacer, sino con su sola apariencia, y la apariencia es asunto de luz y de brillo, de masas, de posición y de valores. La apariencia es de hecho, un asunto meramente de efectos, y es con los efectos de la naturaleza con las que tienes que vértelas, no con la condición real del objeto. Lo que vosotros, como pintores, teneis que tratar no es con las cosas tal como son, sino con las cosas tal como parecen ser, no con las cosas como son, sino con las cosas como no son…Ningún objeto es tan feo como para que bajo ciertas condiciones de luz y brillo, o de proximidad a otras cosas, no resulte hermoso; ningún objeto es tan hermoso como para que bajo ciertas condiciones, no parezca feo. Yo creo que cada 24 horas, lo que es bello parecerá feo, y lo que es feo parecerá bello, al menos una vez….(…) No esperéis que la vida sea pintoresca, sino intentad ver la vida bajo condiciones pintorescas…(…) En la Naturaleza uno las espera, las contempla, las escoge; y si uno espera, contempla y escoge, ellas vienen…(…) En Gower Street, por la noche, puedes ver un buzón que es pintoresco; en los muelles del Támesis puedes ver un policía pintoresco. Incluso Venecia no es siempre bella, ni Francia. (…) Es mejor vivir en una ciudad con clima cambiante que en una ciudad de bonitos alrededores…”
¿Se puede ser más lúcido? ¿Se pueden sentar mejor las bases de lo que es o debe ser el sentimiento artístico? Evidentemente no. Para terminar, quiero citar la definición de Arte que hace el propio Wilde en este mismo texto, al comienzo. Desafío a cualquiera a que me haga una definición más válida, precisa, universal de la noción de arte…
No me atrevo ni a traducir la idea de Wilde al respecto, para que no pierda su colosal exactitud:
“We on the contrary, seek to materialise the beauty in a form that gives joy to the soul through the senses”
Ahí quedó eso. No hay más que hablar. Ni que escribir.
Estos días de Julio de 2007, en un acto de recaudación de fondos para Hillary Clinton, Buffet hizo unas declaraciones sabrosas contra el sistema fiscal de los países desarrollados. Explicó que él, uno de los 3 hombres más ricos del mundo, pagó un 18% de impuestos, mientras que su secretaria pagó un 30%. Pero Warren fue más allá. Ha desafiado a cualquier periodista a que encuentre un sólo caso de un millonario en el mundo que tenga una mayor presión fiscal que su secretaria. Creo que hay algo valioso en juego.
Buffet siempre es provocador. Lo terrible es que tenga que ser un supemillonario como él quien venga a recordar lo injusto del sistema fiscal liberal. Donde están los cerebros de la izquierda, ¡ay! adoctrineros altivos, decidme en el alma quien, quien levantó los olivos. Vamos, vamos, que tenga que venir el Buffet a arremeter contra los neocones. Manda narices.
La verdad es que hay que reconocer que una buena parte de los ahorros fiscales de Buffet se debe a su contribución al proyecto de su íntimo Gates contra la Malaria y otras causas justas (La importantísima Fundación Bill y Melinda Gates). Eso está de maravilla, porque la Malaria sigue afectando a uno de cada tres niños en Africa, por ejemplo. Y es un factor de horroroso subdesarrollo para muchos paises azotados por el malvado plasmodium. Bravo por Warren y Gates, pues. Y hasta me convenceré de instalar un Vista, incluso ahora que todo el mundo dice que es un colosal desastre.
Otra cosa graciosa del Buffet-e igualmente una queja con retranca contra los sistemas fiscales al uso- es su empeño en no hacer donaciones en vida a causas de caridad (exceptuando lo de Gates). Dice que el sistema fiscal favorece a las donaciones mortis causae, por lo tanto él prefiere reinvertir el dinero y donarlo cuando la palme…¿Astucia? ¿Coña? ¿Sarcasmo? ¿Cinismo? Este tipo es un figura.
“Fata viam invenient”. Así lo expresaban los latinos. De alguna manera, el destino se abre camino.