Joludi Blog

Mayo 26
Las tijeras que cortan el terciopelo.
“El príncipe Rau Shin le preguntó a su viejo tutor, el venerable Saomar, qué cosa debía cultivar más a fin de estar bien preparado el día que le correspondiese heredar el Reino:
¿Debía esforzarse por dominar el...

Las tijeras que cortan el terciopelo.

El príncipe Rau Shin le preguntó a su viejo tutor, el venerable Saomar, qué cosa debía cultivar más a fin de estar bien preparado el día que le correspondiese heredar el Reino:
¿Debía esforzarse por dominar el arte del raciocinio o bien debía cultivar la habilidad de decidir con acierto cultivando un instinto rápido como el rayo?
¿Debía ser más calculador que intuitivo, o tal vez al revés?
Debía aprender a dominar, a anular sus pasiones o bien debía descubrir cómo usarlas al servicio de la voluntad de hacer felices a sus súbditos.
Qué era más importante, en suma, para ser un buen rey, ¿la cabeza o el corazón?
Por toda respuesta Saomar le entregó a Rau Sin unas tijeras. Y le pidió que cortase un trozo de terciopelo.
Así lo hizo el joven príncipe.
–Dime Rau Shin–preguntó el sabio–¿cuál de las dos hojas de las tijeras es la que ha cortado el terciopelo?”