
Vending
Durante un tiempo me entretuve registrando las modalidades más originales de vending con las que me iba encontrando. Elaboré una larga lista de las máquinas expendedoras más chocantes con las que me iba encontrando. Desde la máquina de venta de gusanos vivos para pesca que ví en un puerto del Mediterráneo a la máquina de venta de lencería íntima femenina usada con la que topé en una calle de Osaka. Pasando por las estupendas máquinas de venta de leche fresca que ví por primera vez en una plaza de Alsasua, las máquinas expendedoras de teléfonos móviles que encontré junto al campo de golf de Augusta o las máquinas expendedoras de pizza recién hecha que me asombraron en Roveretto.
Pero lo mejor estaba por ver. Ahora me entero de que en Australia (concretamente en la Martin Place de Sidney) han instalado máquinas que venden felicidad.
Como lo oyes. Echas una monedita y te salen, debidamente empaquetados como golosinas o chocolatinas, consejos de autoayuda para que seas más feliz. Hay hasta diez variedades, todas al mismo precio.
Es fascinante ¿no? Lo curioso, curiosísimo, es que al parecer están teniendo un enorme éxito. O tempora…!