Joludi Blog

Mar 8
Invisibilidad.
Desde el año 2006 se están produciendo muchos avances en algo que parecía reservado a la ciencia ficción: la invisibilidad.
Los planteamientos teóricos son claros. Se trata de crear un tipo de material capaz de hacer “resbalar” las...

Invisibilidad.

Desde el año 2006 se están produciendo muchos avances en algo que parecía reservado a la ciencia ficción: la invisibilidad.
Los planteamientos teóricos son claros. Se trata de crear un tipo de material capaz de hacer “resbalar” las ondas luminosas que inciden sobre un objeto.
Hay varios equipos de investigadores trabajando seriamente en este tema, uno de ellos es, por cierto, español.
La carrera hacia la invisibilidad comenzó oficialmente cuando un equipo de científicos de la universidad Duke consiguieron hace un par de años hacer invisible un cilindro de cobre. Pero había trampa. Porque la invisibilidad era tan solo respecto a un ojo que sólo pudiese ver microondas. El cilindro seguía estando ahí para cualquiera que mirase.
Ahora bien, la diferencia entre las microondas que fabrica el horno que tenemos en la cocina y las ondas lumínicas que vemos cuando miramos al mundo, es tan sólo una cuestión de detalle. Las microondas del horno o del móvil tienen una longitud de onda un poco más grande que la luz infrarroja y esta tiene a su vez una longitud de onda algo más grande que la luz visible. Pero básicamente estamos hablando de ondas electromagnéticas en todos los casos. La naturaleza es la misma.
Por lo tanto, el descubrimiento de un metamaterial que sea capaz de hacer resbalar la luz visible, es realmente una cuestión de tiempo. Con ello, la Humanidad conseguirá hacer realidad una de las constantes de sus sueños colectivos, desde Amon-Ra o la leyenda griega de Perseo y Medusa hasta el Hombre Invisible de Wells o los poderes mágicos de Harry Potter, sin olvidar el traje de camuflaje de Predator o el Aston Martin evanescente de James Bond.
Quien sabe si ya lo han descubierto. A lo mejor, los experimentadores andan por ahí dando vueltas embutidos en sus ropas de metamaterial invisible sin que nos demos ni cuenta. Deben estar divirtiéndose mucho.