Gestos.
En Japón hasta la expresión corporal es totalmente distinta a la europea. Hay que andarse con ojo. Si quieres decir que algo está bien colocando los dedos índice y pulgar para formar un círculo (el clásico gesto de OK), aquí es posible que interpreten que quieres dinero (monedas) o, si estás en una tienda, que quieres unos preservativos (de hecho el gesto se llama “condohmu”). Si colocas los dedos pulgar, índice y corazón como indicando que te refieres a algo pequeño, interpretarán que estás haciendo el gesto del palillo y pensarán que lo que deseas es comer (gesto de “shokuji”). Para decir que algo está muy caliente, no soplan y jalean la mano, sino que ponen los dedos forma de círculo junto a los lóbulos de la oreja, como simulando un par de pendientes (gesto de “atsui”). Si golpean enérgicamente con el puño en la palma de su mano, no significa que quieran desenterrar el hacha de guerra contigo, simplemente quieren decir que están completamente de acuerdo con lo que dices.
Nada es del todo universal en materia de lenguaje. Ni siquiera el lenguaje de los gestos.