Mozilo.
Este tipo tiene indudablemente cara de tiburón. Pero es que resulta que lo es. Se llama Mozilo. Un nombre muy apropiado. Y es uno de los prebostes del mundo financiero que se han forrado a costa de las hipotecas basura.
Mozilo es el fundador y dueño de uno de los mayores bancos norteamericanos especializados en hipotecas sub-prime. Su entidad venía manejando las hipotecas de más de 9 millones de hogares norteamericanos, que se dice pronto, por un importe de 1,5 billones de dólares (es decir, un 15 seguido de 11 ceros). En dólares.
El pajarraco este ha dejado tocado financieramente hablando a medio mundo. Su banco se ha hundido inexorablemente, dejando en la calle a 11.000 empleados.
Pero eso sí, el año pasado, el tipo este cobró religiosamente su salario de 10,5 millones de dólares, más un jugoso bonus de otros 125 millones de dólares, en la forma de canje de opciones y venta de títulos.
En Estados Unidos dicen que la gente gana lo que produce. Pero entonces este tipejo no debería haberse llevado ni un céntimo. Así que eso debe ser un mito.
Lo cierto es que este hombre, hijo de un carnicero, se hizo a sí mismo. Todo un ejemplo del mito americano. Partir de la absoluta miseria para alcanzar las más altas cimas de la sinvergonzonería.
Y asombra saber que hasta hace unas semanas, andaba aún dando conferencias por las Universidades, ante el escándalo de los estudiantes con dos dedos de frente.
Quiero pensar que ya tienen una habitación preparada para él en el Hotel Sing Sing.