Joludi Blog

Feb 23
Velocitas eradico.
Einstein nos enseño que la velocidad ralentiza el paso del tiempo. Pero por experiencia sabemos que en el campo de la conciencia ocurre todo lo contrario. Una vida acelerada nos produce un sentimiento de que el tiempo se acelera,...

Velocitas eradico.

Einstein nos enseño que la velocidad ralentiza el paso del tiempo. Pero por experiencia sabemos que en el campo de la conciencia ocurre todo lo contrario. Una vida acelerada nos produce un sentimiento de que el tiempo se acelera, de que la existencia se nos escapa. La velocidad ambiental, que lo invade todo, desde las comunicaciones a los transportes o la información, es entonces la peor de las tragedias que podemos vivir, porque nos arrebata lo mejor que tenemos, el tiempo. Fast Food, Parking Express, Instant Messages…Todo parece que tiene que ser cada vez más rápido, necesariamente más inmediato. Y esta tendencia acabará por aniquilar el mundo. Es preciso rebelarse contra la obsesión por la aceleración. No basta con movimientos como Slow Food, que promueve la comida lenta y digna frente a la cultura del burger y el bocata. Hace falta algo de mucho más alcance. La obsesión por la rapidez y la inmediatez es un virus que algún pérfido Doctor No inoculó en los seres humanos para aniquilarlos, envejeciéndolos. Velocitas eradico, decían los latinos y con ello querían significar en dos palabras el poder destructor de la velocidad o lo rápidamente que destruyen algunos. Y ahora ha hecho suyo este lema la Navy para inspirar un proyecto de un nuevo arma destructora electromagnética. Pero no hace falta que construyan ese nuevo cañon láser soñado por Tesla. La velocidad en sí misma ya es el gran arma de destrucción masiva. Velocitas eradico, sí.