Casas de Citas.
En el centro histórico de Málaga, por la magnífica zona de la antigua judería y aledaños, al Ayuntamiento le ha dado por llenar las fachadas de las casas con inscripciones de frases célebres de diferentes autores: pensadores, poetas, escritores…Vas caminando y sobre un portal te encuentras una frasecita de Fray Luis de León, más allá, un verso de Neruda, y un poco más lejos, un aforismo de Seneca. La cosa tiene gracia. Y me imagino que facilita a la gente la siempre penosa tarea de dar indicaciones a los foráneos para orientarse en el laberinto de aquellas callejas:
–¿Que cómo se llega a la Iglesia de los mártires? Pues muy fácil. Pase por delante de lo que decía Aleixandre y cuando vea lo de Lorca y eso de que las estrellas que no tienen novio, gire a la derecha y ya habrá llegado.
Mi favorita entre todas esas citas de las fachadas, es una que estaba escrita desde mucho antes de que al ayuntamiento le diese esta venada apodíctica. Son los versos inmortales rotulados en la pared del edificio que albergó antaño el legendario café de Chinitas, en el callejón del mismo nombre.
“En el Café de Chinitas
dijo a Paquiro su hermano:
‘soy más valiente que tú
más torero y más gitano’
Camino Larios abajo repitiendo estos versos que enuncian lo gitano como virtud, mientras me acuerdo, abochornado y entristecido, de lo que acaba de ocurrir en un poblado gitano de un lugar de Europa, de donde familias enteras han tenido que salir huyendo despavoridas, con sus niños en brazos, ante la agresión impune de manadas de miserables. Nada toreros. Nada valientes. Nada gitanos.