Joludi Blog

Feb 25
Excedente de represión.
Todo fenómeno humorístico tiene algo de iconoclasta. Posiblemente, lo que nos hace reir no es otra cosa que la ruptura súbita, inesperada de la tensión cultural. El efecto cómico se produce cuando dejamos que se vaya...

Excedente de represión.

Todo fenómeno humorístico tiene algo de iconoclasta. Posiblemente, lo que nos hace reir no es otra cosa que la ruptura súbita, inesperada de la tensión cultural. El efecto cómico se produce cuando dejamos que se vaya súbitamente por el desagüe ese inevitable “excedente de represión”, que es el peaje que según Freud o Marcuse se nos impone por la vida en sociedad. Por eso, hay pocas cosas con tanta fuerza cómica como la burla de los muchos excesos y truismos intelectuales. Lo supo ver Woody Allen, con aquella maravillosa colección de relatos reunidos bajo el título “Cómo acabar de una vez con la cultura” (el mejor texto era “La Puta de Mensa”, sin duda, o la partida de ajedrez por correspondencia entre dos tramposos). Ahora, está a punto de estrenarse una serie de episodios de tv que explotan exactamente la misma mina humorística. Es una producción de RTVE y nos mostrará a señoras en la peluquería discutiendo animadamente sobre el imperativo categórico kantiano y cosas así. La risa está garantizada (gracias, Santi). Como lo está cuando se escucha el memorable clip de audio de aquella galerista indignada porque le han retirado el proyecto de exponer en Nueva York (gracias, Marta). El lenguaje y el tono de esta pintora cabreada, a caballo entre los morancos y una figura del arte conceptual, y que combina la temática artística de vanguardia con un genuino estilo de patio de vecindad, es hilarante.