Joludi Blog

Sep 20
Humana, demasiado humana.
Está muy mal llamar “La Divina Comedia” a la Commedia que escribió Dante. El título que dio el genial florentino a su obra fue “Commedia” a secas. Y es un título muy bien pensado y escogido, pues pretendía reflejar en sus...

Humana, demasiado humana.

Está muy mal llamar “La Divina Comedia” a la Commedia que escribió Dante. El título que dio el genial florentino a su obra fue “Commedia” a secas. Y es un título muy bien pensado y escogido, pues pretendía reflejar en sus cantos el gran teatro que el mundo es, y hacerlo íntegramente, sin dejarse un vicio, una pasión, una virtud o una miseria…
En Italia, era usual llamar “divino” a algo muy bueno, excepcional. Por ejemplo, a Leonardo le llamaban “il Divino”. Pero ese calificativo no tenía, en ese uso, la menor relación con lo religioso. A la Commedia del Dante, comenzó a llamarla “divina” nada menos que Bocaccio, y en el siglo XVI, las ediciones impresas recogen por primera vez este epíteto. El primer caso registrado en el que aparece “Divina” es ésta edición veneciana de Ludovico Dolce, que reproduzco,  impresa en 1554 en el taller de Gabriel Giolito de Ferrari y Hermanos. Aún se puede adquirir algún ejemplar de esta bellísima edición, por ejemplo en Hudson Street, en Nueva York, por unos 12.000 dólares.
¡Pero cómo iba Dante a atreverse a titular su propia obra como “Divina”! Entonces sí que le hubiesen conseguido quemar en la hoguera sus compatriotas florentinos, tal como lo intentarón sin éxito (“…igne comburiatur sic quod moriatur.”)
Lo que pasa es que desde la perspectiva de otros idiomas, esto de Divina parece sugerir una connotación más o menos religiosa. Y nada más lejos de la realidad. Por más que la obra esté ambientada en el Cielo, el Purgatorio y el Infierno.
La Commedia es una obra genial, inmensa, y sobre todo maravillosamente humana. De hecho, es su prodigiosa humanidad lo que la hace única, especialmente si tenemos en cuenta cuándo fue escrita. Si no fuese por su imposible traducción (no se puede traducir a Dante sin perder irremisiblemente la genial musicalidad de esos versos), estoy seguro de que, por su profundo conocimiento del alma humana y sus secretos,  la Commedia sería reconocida como la mayor obra literaria de la Historia.

Y desde luego que es divina.

Pero para nada Divina.