Nov
18

Teléfonos.
Un amigo mío, al que aprecio y admiro mucho, trabaja en un mercado difícil pero bonito. Su empresa se dedica, entre otras cosas, a facilitar las comunicaciones telefónicas baratas en países del Tercer Mundo. Desde Nigeria a Yemen. A mi amigo le encantará saber que, sorprendentemente, más de la mitad de la Humanidad parece que no ha recibido una sola llamada telefónica en su vida. Hay negocio por lo tanto. Y un negocio, repito, bonito.
(Por cierto, este dato estadístico es de los pocos que me he atrevido a aventurar sin confirmarlo por otras fuentes. Simplemente lo he oído en la televisión. Pero ya se sabe que lo que sale en la tele es verdad. Por definición.)