No quieren vivir más. Ya tienen suficiente. Al menos eso es lo que se deduce de una encuesta realizada por el Pew Research Center. Han preguntado a la gente si desea alargar la vida hasta los 120 años, con ayuda de las nuevas tecnologías médicas. La respuesta ha sido demoledora. No merece la pena (56%). Sobre este tipo de investigaciones conviene meditar. O tal vez no meditar mucho.